Los filtros de alta presión son capaces de retener microorganismos y partículas, como polvo, agua, aceite, que pueden dañar el sistema donde se usen. También tienen una gran resistencia para soportar las altísimas presiones que se manejan. Para lograr su objetivo, se implementa un concepto en su diseño, que algunos comprenden, pero no con detalle. Nos referimos al micrón.
Lo que deben saber sobre lo micrones
Un micrón consiste en una unidad de medida, que corresponde a una millonésima de metro de largo. Para tener una idea estimada de su aplicación, consideren el cabello humano. Su sección transversal promedio es de aproximadamente 50 micrones. Esto es algo apenas perceptible para el ojo humano, que apenas puede observar aquello que mide más de 40 micrones.
La medida anterior es el límite inferior de visibilidad y, bajo él, se fabrica la mayoría de los filtros de alta presión, como el nuevo modelo para sistema intensificador M-HC-012/-013 de Minibooster, cuyo elemento filtro estándar, es de 12 micrones. Para estimar su tamaño, compárenlo con los glóbulos blancos, rojos y bacterias. Los primeros miden 25 micrones, los segundos 8 y los últimos 2.
Ahora bien, la clasificación en micrones se utiliza para resaltar la capacidad de los filtros para aislar contaminantes según las dimensiones de las partículas. Esta no describe completamente el rendimiento de los filtros sin una relación beta o eficiencia asociada. Los filtros con clasificación de 10 micrones, como el modelo en T de Minibooster, tienen cierta capacidad para capturar partículas que tengan 10 micrones como tamaño mínimo.
No obstante, se requiere información adicional, debido a que no hay forma individual aceptada de medir y describir la cantidad y tamaño de contaminantes que pueden retener los filtros. Para que la clasificación en micrones sea verdaderamente útil, es importante conocer la eficiencia de extracción de los filtros de alta presión respecto al tamaño específico de las partículas a retener. En realidad, existen muchas variaciones de las clasificaciones en micrones; sin embargo, los expertos suelen utilizar dos:
Clasificación nominal en micrones
Expresa la capacidad de los filtros para retener partículas de tamaños específicos con una eficiencia que oscila entre 50 y 90%. Para entender esto, pongamos un ejemplo. Una clasificación nominal del 50% a 10 micrones, quiere decir que el filtro puede capturar hasta el 50% de las partículas que miden 10 micrones. Deben considerar que estas clasificaciones pueden variar para capturar partículas de tamaño específico desde una eficiencia del 50 al 98.6%.
Clasificación absoluta en micrones
Indica que los filtros de alta presión son capaces de extraer como mínimo el 90.7% de un tipo de partícula de tamaño específica. La determinación de esta clasificación se realiza por medio de pruebas de pasada única o de múltiples pasadas, donde el fluido que posee una cantidad mensurable de partículas pasa por una lámina plana de material filtrante. Aquellas que atraviesan son medidas y contabilizadas. Se trata de la más utilizada, ya que ofrece información más abundante y precisa en comparación con la clasificación nominal en micrones.
Para elegir un ejemplar con clasificaciones adecuadas, conviene contactar a varias empresas proveedoras de filtros para sistemas de alta presión. Cuando se contacta a una de ellas, les proporcionará las clasificaciones nominales y absolutas en micrones. Comúnmente, la capacidad nominal consiste en una clasificación del 50% de eficiencia, aunque debe corroborarse el dato en caso de no especificarse.
Si otro proveedor les especifica la clasificación en micrones, deben cuestionar si es absoluta y nominal, además de la capacidad de filtración de contaminantes y el porcentaje de eficiencia. De esta manera, evaluarán mejor el rendimiento de los filtros que son comparados.
Adquieran un filtro de alta presión con MaxipressTec
Si utilizan intensificadores minibooster de aceite para optimizar su sistema, adquieran filtros de la misma marca con MaxipressTec. Proporcionan un montaje compacto, además están diseñados para filtrar solo el aceite que se usa en el sistema, lo que impide el paso del 80 y 90% de aceite utilizado para impulsar el cilindro hacia adelantes. La empresa fabrica sus filtros con acero de alta resistencia, para soportar las altísimas presiones que generan los intensificadores, además su extracción es sencilla al igual que su limpieza y reemplazo.
Si desean un ejemplar de calidad, recomendamos el filtro en T, cuyo filtro estándar es de 10 micrones. Estos son protegidos de los flujos de retorno gracias a las válvulas de retención integradas. Brindan protección en sistemas hidráulicos de hasta 800 bar, además su diseño y rendimiento es semejante al de los modelos de filtro en T FIL-5_T, aunque tienen la ventaja adicional de filtrar en el lado de alta presión.
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