Los bancos de prueba son equipos con los que es posible someter a varios psi a una pieza en concreto como acople, tubería, entre otros y de esta manera comprobar si los componentes serán capaces de resistir estos niveles en la práctica; así, no tendrá inconvenientes al momento de la instalación o durante el funcionamiento. Existen dos tipos de test que puede realizar con estos elementos, la neumática y la hidrostática; la primera se basa en gases para medir la resistencia ante fluidos de aire.
En cuanto a la segunda se trata de una prueba que emplea agua a presión y que está destinada a verificar si los elementos son capaces de resistir el flujo. Se especializa en tuberías y racor en general que se destinen a infraestructuras hidráulicas industriales, principalmente en actividades de limpieza, acueducto, alcantarillado, entre otras que involucran el paso de líquidos de diferente viscosidad a presión.
Este último tipo de prueba en el sistema de alta presión ha sido sometida a varios conceptos erróneos que impiden que se obtengan resultados fiables en los test realizados. Por ese motivo, en el artículo de hoy nos hemos propuesto desmentir algunos mitos que hacen que el ensayo hidrostático no salga bien.
Es una prueba no destructiva
Este es uno de los mitos más frecuentes de los bancos de prueba hidrostáticos, ya que muchos consideran que sin importar el nivel de presión que le suministre al sistema las piezas no estallarán o destruirán. Esta afirmación es completamente falsa, y es importante destacar esto, porque con frecuencia se ve en redes sociales o en demás sitios de internet que algunos proveedores afirman que se trata de un test no destructivo con el fin de venderle los productos.
Sin embargo, toda prueba que realice, sin importar el fluido a presión que emplee para medir la resistencia de los materiales, tiene el riesgo de ser destructiva si aplica más fuerza de la que es soportada por los implementos.
Y es que, para que sea considerada como una prueba no destructiva, es necesario que al momento de medir la sanidad de los materiales sin afectar sus funciones, integridad o propiedades.
Claramente, ni la prueba hidrostática ni la neumática encajan en la definición de no destructiva, ya que no sólo puede dañar y destruir el componente que se esté evaluando, sino que también corre el riesgo de afectar las piezas circundantes e incluso a las personas que se encuentran a su alrededor, por lo que al momento de realizarla hay que tener mucho cuidado con el nivel de presión que se implemente.
Si se pierde la presión se debe a una fuga del fluido
Usualmente se asocian las pérdidas de presión con fugas de fluido en el sistema, pero, la realidad es que no se correlacionan con una baja de psi en todos los casos; de hecho, en la mayoría se debe a factores varios como la temperatura del ambiente, velocidad del viento, presión atmosférica, humedad relativa e incluso las propiedades térmicas del líquido.
Es importante tener en cuenta estos factores adversos, ya que si identifica una alteración del nivel de psi en los barómetros de los bancos de prueba requiere de una justificación clara y no es posible asociarla a una fuga si esto no es verídico.
Desconocer el objetivo de la prueba hidrostática
Muchas personas creen que el uso de la prueba hidrostática está limitado a la comprobación de los estándares de presión de un sistema y por ende aplican el test sin tener conocimiento de las conclusiones reales que aporta este equipo. En realidad, la finalidad de este procedimiento es conocer la capacidad de un implemento de mantener sus propiedades, hermeticidad y trabajo ante un determinado nivel de presión dentro de un entorno cerrado.
La prueba hidrostática detecta fugas
Esta es una de las afirmaciones más comunes y erróneas que se presenta en el día a día en este ámbito. La realidad es que las pruebas, tanto hidráulicas como neumáticas, tienen la finalidad de comprobar la capacidad que tiene un implemento para resistir ante un nivel de presión determinado y así corroborar su eficiencia dentro de un sistema real.
En ningún momento detectaron fugas; en cambio, el técnico a cargo de la prueba verificará si existe un goteo o lagrimeo que le indique que el flujo de la presión cambia o que la resistencia del material se ha comprometido.
Criterio de aceptación de una prueba hidrostática
El criterio de aceptación de una prueba hidrostática no es estándar, sino que dependerá de diferentes factores que deben ser evaluados para considerar que un material pasó el test. Hay que tener en cuenta la calidad del implementó, el tiempo que se sometió a la presión, el tipo de sistema en el que será instalado, la pérdida porcentual de psi en un lapso determinado en comparación con otras piezas, dimensiones del elemento, particularidades de la infraestructura que se construirá.
En cambio, existen materiales que sí establecen un criterio de pérdida de PSI permitido, como el caso de las válvulas, los cuales se basan en diversas normativas internacionales que no son alterables.
Estas son algunas de las afirmaciones erróneas de los bancos de prueba hidrostáticos, si desea conocer más o cotizar los equipos, llámenos al (722) 773 6689 y (722) 688 6351 o contáctese a través del chat que se encuentra en nuestro sitio web.